México tiene en su historia una larga lista de deportistas que han dejado huella en cada una de sus disciplinas, pero si hay alguien que llegó a la cima y conquistó el tatami, esa es María del Rosario Espinoza.
La taekwondoín mexicana, con 31 años de edad, la mayoría de los cuales ha brindado grandes alegrías a la afición azteca, entre las que destaca la medalla de oro en Beijing 2008 en la categoría 67 kilogramos venciendo a la noruega Nina Solheim.
María no dejó de brillar y tras las preseas de bronce y plata en Londres 2012 y Brasil 2014, se convirtió en la primera atleta tricolor en subirse al podio en tres ediciones de los Juegos Olímpicos.
En su trayectoria destacan dos medallas en Juegos Panamericanos y cinco en Juegos Centroamericanos y del Caribe, dos de ellas áureas.
Con 31 años cumplidos, “Chayito” Espinoza se plantea su último ciclo rumbo a Tokyo 2020 en el que espera despedirse con una gloria más en su carrera y dejar su nombre plasmado en la historia del Taekwondo mundial.
Por otra parte, la taekwondoín mexicana, triple medallista olímpica, prepara en España su participación en los campeonatos mundiales que se disputarán del 15 al 19 de mayo en Mánchester (Reino Unido) y los Juegos Panamericanos del próximo mes de julio en Lima (Perú), pero siempre con “el sueño” de la cuarta medalla olímpica en la cabeza.
Quiere estar entre las mejores en estas citas internacionales inminente, pero su gran objetivo, antes de anunciar su retirada de los tatamis, es más ambicioso: “Ganar la cuarta medalla olímpica en Tokio es un sueño”, dijo la deportista mexicana en una entrevista concedida a EFE.
“Mi retirada está cerca y soy consciente de que Tokio serán mis últimos Juegos Olímpicos. Sin duda estoy en el ciclo más complicado de mi carrera y ganar cuatro medallas en unas olimpíadas es un reto muy grande que espero superar”, añadió.
Espinoza conquistó el oro en Pekín 2008, el bronce en Londres 2012 y la plata en Río de Janeiro 2016 en la categoría de +67 kilos.
La deportista más laureada de México está concentrada en Palma y se entrena en el gimnasio Club Élite Ramos-Brigitte, propiedad de los medallistas olímpicos y mundiales españoles José Antonio Ramos y Brigitte Yagüe, para cumplir sus objetivos.
Sus entrenamientos diarios son exhaustivos junto al equipo que la acompaña: Julio Álvarez, entrenador, Jesús Bedoya, médico, y Edgar Paredes, fisioterapeuta.
“El año pasado estuvimos aquí con José Antonio Ramos y nos gustó muchísimo”, dijo Espinoza.
“Mis objetivos son claros: sobre todo, el aprendizaje que llevamos con los petos electrónicos. El nivel que hay aquí es muy alto y la ayuda que nos está brindando José Antonio es muy importante porque así afinamos los detalles para competir en Manchester”, añadió.
La taekwondoín comparte el duro trabajo en los tatamis con la medallista panamericana puertorriqueña Crystal Weekes y otras grandes figuras mundiales de ese deporte.
Todo el esfuerzo lo enfoca hacia la conquistar de su tercera medalla mundial en Mánchester, tras las obtenidas en 2007 y 2017 (oro y bronce), aunque admite que no será fácil por la entidad de sus principales adversarias y el cambio experimentado por el taekwondo en los últimos años.
“Hay muchas rivales de gran nivel en el campeonato del mundo. Tengo que estar alerta, enfocada y sobre todo estudiar a cada una de ellas”, indicó.
Espinoza consideró su continuidad en el taekwondo tras los Juegos de Río, cuando se tomó un descanso. Al regresar a la selección mexicana aseguró que lo hacía sin presión y sin plantearse “ganar medallas”, sino con la intención de avanzar “paso a paso”.
Sin embargo, ahora se siente, a sus 31 años, feliz por lo que ha conseguido tras una brillante trayectoria profesional y capaz de soñar con la cuarta medalla olímpica.
“Ahí entró el amor de salir a luchar por mi país, siempre con el objetivo de estar entre las mejores”, confesó a Efe en Palma.
Espinoza ocupa actualmente el sexto puesto en el ránking mundial de +67 kilos, liderado por la británica Bianca Walkden. “Chayito” es la primera taekwondoín del continente americano.
La multimedallista olímpica, al volver del Campeonato de Taekwondo celebrado en República Dominicana en el mes de marzo, señaló que viene con un firme objetivo: Llegar a los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020.
“Tokyo 2020 es mi principal motor, mi objetivo. La competencia interna es lo que me ha ayudado, me motiva y me hace sacar el extra”.
Además de tratar de estar en los que serían sus últimos Juegos Olímpicos, Espinoza regresó satisfecha de haber conseguido su pase a Juegos Panamericanos:
“Estoy muy contenta por la clasificación ya que vamos el equipo completo. También estoy contenta por las sensaciones que deja y no queda más que seguir trabajando», comentó.
“Chayito” Espinoza, de esa competencia regresó con una medalla de plata conseguida en la categoría de -73 kg. La campeona olímpica en Beijing 2008 perdió el oro ante la brasileña Raiany Pereira, no obstante, esta derrota no merma su objetivo de estar en la próxima cita olímpica.