Sheinbaum desmiente al Reforma y recuerda matanza de Acteal
La Presidenta Claudia Sheinbaum desmintió un titular del diario Reforma en el que afirma que fue detenida por pobladores por las obras del tren que llegará al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
Durante su mañanera, la mandataria federal exhibió la portada del diario Reforma en la que se asegura que un grupo de pobladores “irrumpió” ante la Presidenta cuando viajaba a bordo del tren que llevará al AIFA, el cual hacía su primer trayecto completo.
Sheinbaum dejó en claro que no fue que los vecinos de la zona hayan irrumpido como dice el medio de derecha, sino que fue ella misma quien pidió al chofer detener el tren para hablar con la gente.
“Cuando vi que tenían la cartulina le dije al conductor: ‘párese antes de que lleguemos para poder platicar con los pobladores’, entonces el tren se paró”, explicó.
Ya una vez entablado en diálogo con los vecinos, se enteró que exigían la construcción de un drenaje que se les había prometido con el tren y que aún no comenzaba su obra. Por lo que se comprometió a concluir la petición.
Finalmente, la mandataria tundió al Reforma por su mentira:
“Todo lo contrario, ni problemas de seguridad ni nada, fui yo la que le pedí al conductor que se parara porque estaban con su cartulina para poderlos atender”, sentenció.
Recuerda la matanza de Acteal
La presidenta Claudia Sheinbaum recordó que este 22 de diciembre se cumplen 28 años de la matanza de Acteal, Chiapas, en la administración de Ernesto Zedillo, en la que 45 indígenas tzotziles, miembros de la organización «Las Abejas», fueron brutalmente asesinados mientras oraban en una pequeña iglesia, y aseguró que su Gobierno no utiliza la fuerza del Estado para reprimir a la gente y por el contrario, garantiza las libertades de las y los mexicanos.
“Somos otra cosa, no somos iguales a los gobiernos del PRIAN, porque en realidad fue lo mismo. Hay mucha hipocresía cuando se habla del autoritarismo, porque no se señalan estos actos criminales desde el Estado, que son muchos, desde el siglo XX y después del siglo XXI, los gobiernos previos al periodo neoliberal y los del gobierno neoliberal”, afirmó durante la Mañanera del Pueblo de este 22 de diciembre.
Señaló que, desde su llegada a la Presidencia, se comprometió a nunca usar la fuerza del Estado contra un pueblo y reiteró que cualquier caso de abuso policial o de algún elemento de las Fuerzas Federales tiene que sancionarse, “pero nunca se ordena desde el Gobierno. Eso sí es autoritarismo”.
Asimismo, destacó que en el país existe libertad de expresión, de movilización y de reunión, y negó cualquier tipo de censura o presión desde la Presidencia hacia medios de comunicación o periodistas. “No hay una llamada por teléfono desde Presidencia para decir: ‘corre a este reportero porque ya habló mal de mí’”, aseguró.
Nosotros creemos en la libertad de expresión, claro, también creemos en la necesidad de un debate y en la necesidad de responder. Pero en efecto, fueron gobiernos muy autoritarios contra el pueblo y hay que recordarlo”.
La presidenta reiteró que su Gobierno cree en la libertad de expresión, en la necesidad de un debate y de responder, pero insistió en que es necesario recordar los actos autoritarios cometidos contra el pueblo en administraciones anteriores. “Pero en efecto, fueron gobiernos muy autoritarios contra el pueblo y hay que recordarlo”, concluyó.
Se cumplen 28 años de la masacre de Acteal
El 22 de diciembre de 1997, 45 indígenas tzotziles, miembros de la organización «Las Abejas», fueron brutalmente asesinados mientras oraban en una pequeña iglesia de la comunidad de Acteal, en el municipio de Chenalhó, Chiapas, masacre, que incluyó a niños y mujeres embarazadas, marcó un antes y un después en la lucha por los derechos humanos en el país.
La matanza fue perpetrada por grupos paramilitares que operaban con armamento de uso exclusivo del Ejército mexicano, lo que generó fuertes señalamientos de colusión entre las fuerzas de seguridad y los agresores. A pesar de las denuncias y de las pruebas recolectadas, como casquillos de bala y testimonios de sobrevivientes, las autoridades de la época señalaron el evento como un conflicto étnico interno, lo que fue rechazado por organizaciones civiles y defensores de derechos humanos.
La organización civil «Las Abejas» fue fundada en 1992 como una respuesta pacífica ante injusticias y abusos en su comunidad. Aunque compartían demandas sociales similares al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), se mantuvieron firmes en su postura no violenta. Sin embargo, el contexto de militarización y represión en Chiapas durante la administración de Ernesto Zedillo exacerbó las tensiones en la región.
En 1997, los acuerdos de paz con el EZLN estaban estancados y los grupos paramilitares, presuntamente vinculados al Partido Revolucionario Institucional (PRI), incrementaron su actividad en comunidades simpatizantes del movimiento zapatista. Acteal fue uno de los escenarios más trágicos de esta escalada de violencia.
El sistema de justicia mexicano ha sido severamente cuestionado por su manejo del caso Acteal. Aunque inicialmente se detuvo a más de 100 personas, muchas de ellas indígenas tzotziles, la Suprema Corte de Justicia de la Nación liberó a la mayoría entre 2009 y 2012, argumentando fabricación de pruebas e irregularidades en los procesos judiciales.
Organizaciones como el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas y sobrevivientes de la masacre han llevado el caso a instancias internacionales, incluyendo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). En 2020, el gobierno mexicano reconoció su responsabilidad en los hechos y ofreció una disculpa pública, además de comprometerse a brindar reparaciones a las víctimas. Sin embargo, la comunidad de Acteal sigue exigiendo que se procese a los responsables intelectuales y materiales de la masacre, incluyendo al expresidente Ernesto Zedillo.
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