Explicó que por un lado, “los niños van acordes al avance de la tecnología, y esto tiene una repercusión sobre el sistema nervioso central; la gente dice vulgarmente que ahora nacen con un chip, es cierto, porque veo la facilidad con la que ellos lo aprenden”.

Por otro lado, la gran dificultad radica en otro aspecto, porque la tecnología es magnífica, sin embargo la aplicación que se hace de ésta significa otra cosa porque hoy en día, y dese antes de nacido el bebé ya se encuentra expuesto.

Reducir tiempo de uso, no condicionar

“Hay una diferencia entre utilizar esta tecnología como una herramienta, a que la vida de la gente empiece a girar a su alrededor, y esa es la parte que nos importa mucho como padres, especialistas en desarrollo infantil, maestros, educadores; de qué manera queremos acotar o propiciar este uso por parte de nuestros hijos”, resaltó.

Dijo que se debería reducir el tiempo de su uso, porque condicionar suena un poco como a sobornar, si haces esto te dejo usar la tableta.

Cuando se habla de alimentación en los niños, una de las cosas que se dice es que no utilices la comida como premio, tampoco como castigo, lo mismo se tiene que hacer con el Internet y no darle un valor agregado, expresó.

Ejemplificó que el infante tiene obligaciones como hacer la tarea, bañarse y al terminar esto, “le dices si a cierta hora terminas tus deberes, tienes dos horas para jugar, ahora vamos a distribuir tu tiempo de juego, es no es puedes estar dos horas en la computadora, es elige tus actividades como andar en bicicleta, salir a dar una vuelta, ir a la tienda, etcétera”.

Riesgos físicos de usar mucho tiempo el celular

Sobre los riesgos físicos, Steinberg comentó que ha escuchado que los menores que pasan mucho tiempo frente a las pantallas del celular, especialmente si la utilizan a obscuras pueden sufrir problemas de la vista, además mencionó el uso de los audífonos con todos estos aparatos, provocan daño en el oído.

Enfatizó que otra cosa es la cantidad de tiempo que en general la gente pasa mal sentada, por textear, la posición que se adopta es incorrecta, porque se está mucho tiempo agachado para ver el celular.

También para ver en la computadora porque no se fijan si están bien o mal sentados, están tumbados en la cama, con la luz apagada y a veces debajo de las sábanas.

En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó a legisladores y profesionales en el ámbito de la salud y la educación, que los niños deben evitar el uso excesivo de pantallas electrónicas, o estar sentados mucho tiempo frente al televisor.

¿Cuánto tiempo es recomendable el uso de dispositivos electrónicos en niños?

En días pasados, indicó que entre los dos y los cinco años, los infantes deben usar los dispositivos electrónicos una hora al día y “si es menos, mejor”.

Añadió que los menores de un año no deben usar tabletas o pantallas electrónicas, y no hacerlo hasta los dos años o después, y sólo durante una hora al día como máximo.

Respecto a los niños de tres y cuatro años de edad, las recomendaciones son que al menos deben tener tres horas de actividad física, de las cuales una hora debe ser de intensidad moderada a vigorosa.

Además, no deben pasar más de una hora sujetos o estar sentados durante mucho tiempo, no más de una hora con uso de pantallas al día.

Refirió que “la infancia es un periodo de rápido desarrollo físico y cognitivo, en el que se adquieren hábitos y rutinas que pueden marcar los niveles de actividad física durante toda la vida”.

La psicoterapeuta por el Instituto Mexicano de la Pareja, resaltó que los celulares, las tabletas, las computadoras, pueden igualarse ahora a cuando no dejaban a los chicos salir un fin de semana. «Ahora es el número de semanas que no pueden usar el celular; la cantidad de papás que castigan a sus hijos con el celular es impresionante».

Una de las grandes preguntas, continuó, es a qué edad un niño puede tener sus propias redes sociales, «hay padres que les permiten tener su primer cuenta de Facebook a los 8 o 10 años, honestamente eso es un gran riesgo”, subrayó.

Manifestó que las ciudades ahora son tan inseguras que los niños no pueden salir a jugar al parque, la mamá y el papá tienen que trabajar, pero la situación es ayudar al menor a organizarse de tal manera que tenga tiempo también para jugar, correr y saltar la cuerda, cosa que ahora ya no se ven.

Se ha perdido la vida familiar

“Da una tristeza ver imágenes de cuando los niños van a visitar a los abuelos, y están todos con sus celulares, y los abuelos ahí sentados, en otros tiempos se aprendía de ellos y eran una guía; ahora los jóvenes les enseñan a los adultos si bien les va, en realidad lo que sucede es que los dejan de lado», detalló.

Añadió que se ha perdido la unión, vida familiar, respeto, y da tristeza ver cómo se está perdiendo esta calidad infantil.

Sin embargo, indicó que muchas de las aplicaciones que están disponibles realmente tienen gráficos extraordinarios, sonido muy bueno, y tienen una idea detrás, por ejemplo de ir descubriendo pistas y cosas por el estilo, por lo que si se le va a dar una aplicación que sea muy buena, pero que no sea lo único que se le ofrece.

“Yo decía que los niños no leen, pero esta generación es la que más escribe, tal vez lo hacen telegráficamente, y lo hacen mal, pero se está usando el textear como una forma de comunicación, ahora se han perdido las reglas de ortografía pero los chicos están escribiendo, y lo están haciendo a todas horas”, expresó.

La especialista en Terapia Ocupacional por la Universidad de Texas-San Antonio, anotó que se pueden hacer talleres para que los padres intercambien ideas sobre cómo pueden jugar sus hijos y que sea sin el uso o el intermediario de la tecnología.

“Nosotros como adultos tenemos la posibilidad de elegir, los niños si es lo único que conocen no van a poder elegir, entonces en nosotros está darles la oportunidad de que también conozcan otras opciones, porque solitos no se las pueden inventar”, precisó.

La creadora del “Movimiento Prohibido Castigar” aseguró que muchos padres no se dan cuenta del problema, pero otros si saben, ante lo cual es importante decir: entonces ahora qué hago. Porque muchas veces si tú como padre de familia le impides a tu hijo tener acceso a la tecnología se vuelve un desadaptado, porque todos sus compañeros sí la usan.