Relata que conoció a Víctor Manuel cuando lo contrató para realizar un trabajo de pintura en su casa, pero que después perdió contacto con él.

Sin embargo, luego de 10 años, un día al visitar a su hija, con domicilio en la Supermanzana 75, al pasar por la calle 42, manzana 18, vio sentada a una persona conocida, al acercase, se percató y confirmó que se trabaja de un viejo conocido, era Víctor Manuel Mota Arellano.

Desde ese día, de manera constante lo visita, pero luego de mes y medio decidió hacer algo más, al ver las condiciones por las que atraviesa Víctor, quien perdió la visión por un problema de cataratas; de igual manera padece de diabetes.

“Es en estas circunstancias cuando realmente te das cuenta de los verdaderos amigos; Víctor siempre está solo, con trabajo camina, porque ya no puede ver; y gracias a la caridad de los vecinos es que come, pues le regalan un bocado o lo que sea”, comentó José.

Víctor Manuel platicó de manera breve al equipo de Denuncia Ciudadana Turquesa que en Cancún no tiene a nadie, pues sus padres fallecieron hace tiempo, al igual que su único hermano, por lo que no sabe si tiene familia en Tapachula, Chiapas; no obstante, espera tener algún familia que lo pueda ayudar.

Además, pide a la ciudadanía le ayude para conseguir un lugar dónde poder vivir: hace tres meses que no paga la renta de 700 pesos mensuales del cuarto que habita en la Supermanzana 75, por lo que el propietario ya le pidió que desaloje.

Por ello, su amigo José Manuel Méndez Arias espera que pronto las autoridades correspondientes acudan a este llamado de ayuda para canalizar a un lugar apropiado a Víctor, quien necesita además de atención médica y alimentos, del calor humano.