Jalisco eligió el camino del endeudamiento para enfrentar las consecuencias de la pandemia de COVID-19.
Este 1 de abril se informará cuál será la institución que otorgará un crédito por mil millones de pesos, que deberán estar disponibles de inmediato bajo el argumento de falta de liquidez para apoyar a mipymes y autoempleados.
“Es primordial para afrontar el reto del COVID-19 y de una inminente desaceleración económica”, justificó la Secretaría de la Hacienda Pública de Jalisco.
La convocatoria para que instituciones financieras se postularan para otorgar el crédito se realizó el 24 de marzo, un día después de hacer una orden de compra por 20 millones 697 mil pesos para pruebas rápidas con el fin de detectar COVID-19; su aplicación iniciaría el jueves 26 de marzo, sin embargo, hasta el momento no se cuenta con ellas.
En menos de 18 meses, la administración del gobernador jalisciense, Enrique Alfaro Ramírez, sumará 7 mil 500 millones de pesos (mdp) en créditos, de esa cantidad, mil 600 mdp se utilizarán para enfrentar la crisis sanitaria y fueron solicitados entre febrero y marzo.
“Jalisco tiene la capacidad de contratar instrumentos financieros de corto plazo sin comprometer su capacidad crediticia”, sostuvo en un comunicado el gobierno estatal.
Buena escuela dejó el también priista Roberto Borge a su copartidario Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, aprovechar el momento para pedir un préstamo que solo beneficiará a unos cuantos…, al tiempo.
En la sesión de la Comisión de Higiene y Salud del 19 de marzo, Salvador Caro, coordinador de la fracción de Movimiento Ciudadano, pidió que se autorizara “la posibilidad de explorar el endeudamiento” tras una propuesta de Morena de reorganizar el presupuesto de Salud para enfrentar la crisis de COVID-19.
“La propuesta de Morena era la redistribución de los recursos del sector salud para enfocarlos al tema urgente”, recordó el diputado Morenista Arturo Lemus, quien celebró que el endeudamiento no fuera aprobado por el pleno del Legislativo.
La diputada priista, Mariana Fernández Ramírez, señaló que el endeudamiento debe ser utilizado para infraestructura y obra pública, por lo que expresó su extrañamiento por la urgencia de contratar créditos y llamó a formar un sistema de vigilancia.
“Ese crédito primero lo querían hacer por parte del Congreso del Estado, después se fueron a la modalidad quirografaria. Es importante crear una Contraloría Social, un comité vigilante presidido por el Comité de Participación Social del Sistema Anticorrupción”, consideró.
Ignacio Román Morales, economista del Instituto de Estudios Superiores de Occidente (Iteso), consideró adecuado que Federación, estados y municipios destinen apoyos, pero hizo hincapié en que deben ser de forma coordinada.
“No hay nada que lleve a pensar que esto (destinar apoyos) se hace para obtener moches, pero si se hace así (a través del endeudamiento), es lo primero que uno se puede imaginar”, consideró el académico.
“El endeudamiento es poco transparente”, sentenció por su parte la diputada federal por Jalisco, Laura Imelda Pérez Segura, secretaria de la Comisión de Hacienda en el Congreso de la Unión, quien destacó que esta solicitud de crédito es la cuarta de esta administración en menos de 18 meses.
“La primera deuda que se contrató en diciembre de 2018. Pidieron 800 mdp y se gastaron 600 y en marzo de 2019 solicitaron 5 mil 250 mdp con una obra pública muy cuestionada”, destalló la legisladora federal.
Recordó que se solicitó a la Auditoria Superior de la Federación revisar el endeudamiento a largo plazo destinado al programa “A Toda Máquina”, que contó con “personas cercanas al gobernador”.
Además, dijo que en febrero, el gobierno de Enrique Alfaro Ramírez solicitó un crédito quirografario, que se paga a corto plazo y no requiere autorización del Congreso del Estado, por 600 mdp bajo el argumento de falta de liquidez.
“No ha habido una presentación formal de la aplicación de esa deuda y ahora se habla de la contratación de mil mdp de crédito”, señaló Pérez Segura, quien destacó que la autoridad estatal no ha hablado de las acciones de la federación que pudieron evitar la deuda.
“La Secretaría de Hacienda adelantó lo correspondiente a tres meses del presupuesto de Salud para que los estados tuvieran la posibilidad de atender la contingencia por COVID-19, pero no se está mencionando”, sostuvo la legisladora.
“Por el pleito que tiene el gobierno estatal con el federal, se corre el riesgo de llevarse entre las trancas a la población en términos de certeza sobre el COVID-19, el endeudamiento y la recuperación posterior”, consideró el académico del Iteso, Ignacio Román Morales.
“Se acababan de endeudar con más de 5 mil mdp, ¿cómo podemos decir que un proceso de endeudamiento no afecta a las finanzas? Todo proceso de endeudamiento implica el uso de recursos, hay que tener cuidado”, afirmó.
El académico lamentó que Jalisco no se apegara a las acciones del Gobierno Federal. “Se tomaron decisiones de carácter local que pasan por encima del Consejo de Salubridad General. Es necesario que se coordinen porque está en riesgo la seguridad nacional en términos de salud”.
Con información de agencia Notimex
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