Los profesionales de la salud han hablado sobre el impacto que tiene Fortnite en los niños, comparando su naturaleza adictiva con la de las drogas más fuertes.
Con más 200 millones de jugadores en el mundo, Fortnite está trayendo consecuencias en los niños como que les está costando dormir, dejan de hacer sus tareas escolares, los hace violentos y además los niños están abandonando actividades sociales como practicar deportes.
Michael Rich, director de la Clínica de Medios Interactivos y Trastornos de Internet en el Hospital de Niños de Boston, le contó al diario Boston Globe sobre el impacto de Fortnite en niños.
«No están durmiendo. Ellos no van a la escuela. Están abandonando las actividades sociales. Muchos niños han dejado de practicar deportes para poder jugar», dijo.
«Tenemos un niño que destruyó el automóvil familiar porque pensó que sus padres habían bloqueado su dispositivo en la red», dijo Rich. «Tiró un martillo al parabrisas».
Su relato es solo uno de los muchos que describen la obsesión tan intensa en los niños llevados por los padres a médicos y terapeutas con la intención romper el control del juego sobre sus hijos.
«Uno de los padres llegó al punto de considerar el divorcio», dijo a la publicación Rich Domenico, un terapeuta de LiveWell Therapy Associates, en Back Bay.
«Es similar a trabajar con padres que tienen un hijo adicto a las drogas».
La preocupación de los padres por que sus hijos pasen demasiado tiempo en videojuegos no es algo nuevo, pero hay factores importantes que dificultan abandonar los juegos en línea.
Los avances tecnológicos han hecho que los juegos sean más interactivos y más atractivos con sus colores llamativos y la interacción social con otros jugadores.
«La manipulación psicológica estimula al cerebro y lo entrena para «anhelar» más, dijo Douglas Gentile, un profesor de psicología en un correo electrónico para el Globe.
Los creadores de juegos también utilizan tácticas sombrías adoptadas por los diseñadores de máquinas tragamonedas como un programa de recompensa variable, según Ofir Turel, profesor de Sistemas de Información y Ciencias de la Decisión en la Universidad Estatal de California en Fullerton.
«Los niños son especialmente vulnerables a este mecanismo de» recompensa variable «porque sus cerebros aún están desequilibrados», explicó. «Han desarrollado casi por completo los sistemas cerebrales de procesamiento de recompensas, pero sus sistemas de autocontrol todavía no están completamente desarrollados»
Más del 68 por ciento de los jugadores hacen compras en el juego como armas, movimientos de baile y adornos para personalizar a sus personajes.
El jugador promedio que hace compras ha gastado $ 84.67, según una encuesta de 2018.
Esta noticia fue modificada el 4 abril, 2019 2:21 pm