Joaquin Phoenix. El poder social de la fama
Celebridades más afamadas el mundo han elegido utilizar diversas plataformas para manifestarse como defensores directos de personas vulnerables u otras causas, inspirando con sus acciones a sus seguidores y aun a los que no lo son, a través de sus redes sociales, en los últimos tiempos, hasta de forma presencial en marchas de diversas ciudades del planeta.
Estas acciones son aplaudidas por muchos, pues eligieron defender lo que es correcto y luchar por causas que hacen del mundo un lugar más justo. Tal el caso de la cantante Rihanna, quien fue a Malawi, con Global Citizen, en su papel de embajadora mundial de la Asociación Mundial para la Educación.
La originaria de Barbados utilizó su influencia en las redes sociales para abogar por las víctimas del huracán “María” y los beneficiarios de la GPE al tuitear a los líderes mundiales. En ambos casos, se tomaron acciones de lo que ella sugiría.
Conocido como el actor que retrata a los tipos duros y exjugador de futbol de películas como “The Longest Yard”, hizo algo increíblemente valiente en 2017 cuando presentó su propia historia de agresión sexual en las manos de un poderoso ejecutivo de Hollywood.
Su narrativa ayudó a contribuir al movimiento #MeToo, ilustrando que la mala conducta sexual de hombres poderosos existe en múltiples niveles y en todos los géneros. Por sus acciones, la revista Time lo incluyó en su lista de “Silence Breakers”, individuos que hablaron sobre la agresión sexual y que fueron nombrados como la “Persona del Año” de TIME en 2017.
Tras demandar a un DJ de Denver por haberla manoseado, en un caso judicial muy publicitado a principios de este año y que ganó, se comprometió a donar dinero a organizaciones que ayudan a víctimas de agresión sexual para defenderse. Sus acciones posteriores como defensora de los problemas de las mujeres, la llevaron a la portada de la edición de la “Persona del Año» de la revista Time, junto con otras féminas que presentaron historias de agresión sexual como parte del movimiento #MeToo.
Este matrimonio no se ha quedado atrás. Beyoncé comenzó una beca para mujeres universitarias en Estados Unidos; ayudó a recaudar 44 millones de dólares para los esfuerzos de ayuda del huracán “Harvey” y creó una asociación con UNICEF para entregar sistemas de agua limpia a medio millón de personas en Burundi. Por su parte, Jay escribió un poderoso ensayo sobre el sistema de fianza depredador de Estados Unidos y usó su sello musical Tidal, para ayudar a entregar 200 mil dólares de suministros a Puerto Rico tras el huracán “María”.
Sin duda es la que se ha llevado el aplauso de millones de seguidores y público en general, una de las actrices con mayor peso en el movimiento feminista. En mayo de 2019, Kristen entró descalza al Festival de Cannes, en solidaridad con la periodista de Variety, Claudia Eller, quien vivió un momento incómodo en la alfombra roja cuando le negaron el ingreso por no tener zapatos de tacón y no pudo realizar su trabajo. La profesional tenía la acreditación correspondiente para entrar al lugar pero, al parecer, no pasó el código de vestir.
Siguiendo este movimiento femenil, durante la “Marcha de las mujeres’”(Women´s March), la actriz subió al podio para protestar contra el machismo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Un caso reciente de cuando los artistas han pagado consecuencias por su labor social, es el del arresto del ganador del Oscar como Mejor Actor 2019. El pasado 10 de enero, en las escaleras del Congreso de Estados Unidos, al ser acusado de manifestarse sin autorización, en el marco de la última concentración semanal del “Viernes de simulacro de incendio” (Fire Drill Fridays), organizada por la también actriz Jane Fonda.
Además de Phoenix, el actor Martin Sheen, también fue arrestado. A la protesta en Washington, acudieron las también interpretes June Diane Raphael, Susan Sarandon y Amber Valletta.
Esta noticia fue modificada el 27 febrero, 2020 1:13 am