Pareciera increíble, pero en pleno siglo XXI y en medio del avasallante avance de la ciencia y la medicina, aún persisten muchas creencias que impiden a los individuos de todo el mundo pensar en ser donantes. Aunque suena ilógico, la creencia más popular nace de una vieja leyenda urbana que trata de un hombre que despierta metido en una bañera con hielo y una nota que dice que uno de sus riñones fue extirpado. Esta historia caló tanto en las personas que se han hecho varias películas sobre el tema.
LOS RIESGOS SON MÍNIMOS
Como cualquier otra intervención quirúrgica, esta cirugía conlleva un riesgo asociado. La tasa de mortalidad está estimada alrededor del 0.03 por ciento. Las complicaciones que pueden conducir al fallecimiento del donante son: la hemorragia, la embolia pulmonar, el daño intestinal y el ataque al corazón. Estas dificultades aparecen en aproximadamente un 0.5 – 2 por ciento de los casos, aunque no siempre con fatales consecuencias.
Podríamos donar uno de los dos órganos que tenemos por parejas como el pulmón o el riñón, pero no podríamos donar órganos únicos como el corazón o el hígado. En general, los principales órganos donados son el riñón, el hígado, el corazón, el páncreas, el pulmón y el intestino. También es posible donar tejidos como pueden ser la médula ósea, los huesos, los tendones, la piel, el tejido ocular y las válvulas cardíacas.
LAS LISTAS DE ESPERA
Según cifras del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra), en 2018, en México se realizaron siete mil 583 trasplantes pero hay más de 21 mil 800 personas en espera de un órgano o tejido que salve su vida o le brinde mayor calidad. De los trasplantes efectuados el año pasado, cuatro mil 269 fueron de córnea, tres mil 48 de riñón, 240 de hígado y 26 de corazón.
UNA FECHA DIGNA DE RECORDAR
El 14 de octubre de cada año, se conmemora el Día Mundial de la Donación de Órganos, Tejidos y Trasplantes. Esta fecha fue instaurada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el propósito de incentivar en todas las personas del mundo el querer ser donantes y así salvar la vida de otras personas menos afortunadas en lo que respecta a la salud física.
¿CÓMO CELEBRO LA FECHA?
La mejor manera de celebrar este día es destruyendo los mitos y fantasmas que hay entorno a la donación de órganos y tejidos. Así que lo mejor que podemos hacer es compartir todo lo que sepas del tema, a través del hashtag #DíaMundialdelaDonacióndeÓrganosTejidosyTrasplantes
y sumarte a la lista de donantes. Porque como bien dicen por ahí, nunca sabemos cuándo nos tocará a nosotros.
Legalmente existen dos tipos de donaciones de órganos:
DONACIÓN TÁCITA: Se trata de la negación o de un documento que exprese clara y objetivamente que esa persona se niega a que, después de su muerte, sus órganos y tejidos se utilicen para salvar la vida de otras personas. Claro está, que siempre la familia puede negarse.
DONACIÓN EXPRESA: Aquí sí existe un documento en que la persona afirma que, después de su fallecimiento, desea donar su cuerpo o partes del mismo para ayudar a la ciencia médica y salvar la vida de otros individuos.
Mito: Tengo una condición médica, entonces no puedo ser donante.
Realidad: Cualquier persona, sin importar su edad o historial médico, puede inscribirse como donante.
Mito: Soy demasiado viejo para ser donante.
Realidad: No existe un límite de edad para donar órganos.
Mito: No creo que mi religión apoye la donación.
Realidad: La mayoría de las principales religiones respaldan la donación de órganos y la consideran un acto final de amor.
Mito: Si en el hospital ven que soy donante, no intentarán salvarme la vida.
Realidad: Cuando está enfermo o tiene una lesión y es hospitalizado, la única y verdadera prioridad es salvar su vida.
Mito: Las personas famosas o millonarias que están en la lista de espera reciben los órganos más rápido.
Realidad: Un sistema informático nacional verifica la compatibilidad de los órganos donados con los posibles beneficiarios.
Mito: Mi familia no podrá hacer un funeral con ataúd abierto si soy donante.
Realidad: Generalmente, los donantes de órganos, tejidos y córneas pueden ser velados en un funeral con ataúd abierto.
Mito: Mi familia tendrá que pagar la donación.
Realidad: La donación de órganos o tejidos no implica gasto alguno para los donantes o sus familias.
Mito: Alguien podría tomar mis órganos y venderlos.
Realidad: La ley federal prohíbe la compra y venta de órganos en la mayoría de los países del hemisferio occidental.
Mito: Si estoy en coma, podrían sacarme los órganos.
Realidad: La mayoría de los donantes de órganos fallecidos son pacientes a los que se les declaró muerte cerebral.
Mito: Los miembros de la comunidad de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Personas Transgénero (LGBT) no pueden donar.
Realidad: No existe ninguna política ni regulación federal que excluya a los miembros de la comunidad LGBT de la donación de órganos.
Para ser un donador expreso solo hay que seguir cuatro sencillos pasos:
1.- Informarse: En su sitio web el Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra) tiene toda la información para salir de toda duda respecto a este tema.
2.- Decidirse: Este es quizás el paso más importante, pues una vez que ya se tiene toda la información hay que tomar esta importante decisión.
3.- Registrarse: en su página de Internet, el Centro Nacional de Trasplantes tiene los formatos que hay que rellenar para oficializar tu decisión.
4.- Imprimir tu credencial: esta se te otorgará una vez finalizado tu registro. Siempre hay que llevarla consigo.
IMPORTANTE: No hay que olvidar comentar esta importante decisión con tu familia y amigos, ya que ellos serán los portavoces de tus deseos.
FAMOSOS TRASPLANTADOS
Desde mediados del siglo pasado, los trasplantes de órganos cada vez han sido más comunes y muchas personas trasplantadas, debido a su fama o fortuna, han sido ampliamente difundidas por la prensa y sobre todo hoy, las redes sociales. Entre los que han recibido uno o varios órganos para prolongar su vida están el piloto de carreras Nikki Lauda, las actrices Sarah Hyland y Selena Gomez o los cantantes José Luis Rodríguez “El Puma” y Raphael.
LA HISTORIA DE SELENA GOMEZ
En pleno ascenso de su carrera, esta joven cantante y actriz tuvo que frenar su carrera, porque tenía la enfermedad de lupus, la cual es autoinmune, lo que significa que el cuerpo se ataca a sí mismo destruyendo diferentes órganos. En su caso eran los riñones. Sin embargo, esta joven logró sobrevivir, debido a un gesto desinteresado de su mejor amiga Francia Raisa, quien decidió donarle uno de sus riñones y así alargar su vida.
POLÉMICA DECLARACIÓN DE “CHENTE”
Hace unos meses, el cantante Vicente Fernández hizo una desafortunada declaración respecto al cáncer de próstata que sufrió, pues se negó a recibir un trasplante de hígado: «Me querían poner un hígado de otro cabrón y les dije: yo no me voy a dormir con mi mujer con el hígado de otro guëy. Ni sé si era homosexual o drogadicto», dijo a un reportero y obviamente las redes sociales lo hicieron trizas.
Un estudio reciente reveló que los colombianos, los turcos y los españoles, son quienes más dispuestos están a la donación de órganos post mortem:
(*) Porcentaje de personas que afirmaron ser o tener intenciones de ser donantes de órganos.
Esta noticia fue modificada el 9 octubre, 2019 1:35 am