Las autoridades judiciales de México confiaron que una vez que el gobierno de Estados Unidos detuvo de nuevo a Dámaso López Serrano, El Mini Lic —quien fuera parte de los liderazgos del cártel de Sinaloa—, puedan atender la petición mexicana para extraditarlo y pueda ser procesado por el asesinato del periodista Javier Valdez, corresponsal de La Jornada en Sinaloa, ocurrido en mayo de 2017.
En la mañanera de este martes de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el titular de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero, indicó que se trata de “un tema fundamental para nosotros. Es el autor intelectual de ese asesinato, al resto de los actores los tenemos procesados y en la cárcel, éste nos faltaba”.
Remarcó que desde hace varios años se ha insistido a Washington, “en innumerables ocasiones” la entrega de El Mini Lic —pues se entregó a las autoridades de ese país en 2017—, pero no se había concretado debido a que era testigo colaborador.
“Habían señalado que era un testigo protegido por Estados Unidos, que les estaba dando mucha información y, en razón de eso, no podían ayudarnos”, apuntó el fiscal.
Sin embargo, destacó, ahora que fue detenido nuevamente por tráfico de fentanilo, los estadounidenses “están reconociendo que este individuo está delinquiendo, por lo que hay razones más que suficientes para que ahora sí nos apoyen”.
Refirió que una vez que se supo de su nueva captura, se hizo la petición de entrega a México. “Cuando nos den la respuesta, se las daremos a conocer”.
Por otro lado, se preguntó al fiscal general sobre la extradición de Osiel Cárdenas Guillén, ex líder del cártel del Golfo y fundador de la banda criminal Los Zetas, a lo que el funcionario dijo que ya cumplió su sentencia en Estados Unidos, por lo que fue entregado a México.
“Nosotros lo pusimos a disposición del Centro Federal de Readaptación Social (el Altiplano) y va a cumplir su condena como es obligación y como está señalado en la sentencia y la ley”, expuso Gertz.
Ante la insistencia más adelante para que ahondara en torno al caso de Cárdenas Guillén, el fiscal se limitó a comentar: “Esta persona ya fue recluida para cumplir con sus sentencias que tiene en su contra, y todas las órdenes de aprehensión pendientes se van a ejecutar dentro del propio penal, como es la costumbre y la obligación procesal”.
Osiel “N”, exlíder del cártel del Golfo y Los Zetas, fue extraditado este 16 de diciembre de Estados Unidos a México tras pasar 14 años en una prisión estadounidense.
La oficina en San Antonio, Texas, de la Dirección de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI), fue la encargada de dar aviso de la deportación y aseguraron que se trató del “resultado de una investigación criminal realizada por HSI RGV y nuestros socios de las fuerzas del orden en el Valle del Río Grande”.
Osiel “N” fue detenido en 2003 por el Ejército Mexicano en la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, mientras intentaba escapar de un operativo de seguridad; posteriormente, en 2007, fue extraditado a Estados Unidos.
A Osiel Cárdenas Guillén se le atribuye la creación del cártel de Los Zetas a finales de la década de 1990. Luego de la detención de Juan García Ábrego, líder del Cártel del Golfo, en 1996, Osiel quedó al frente del Cártel del Golfo y se encargó de formar un letal cuerpo de seguridad.
Osiel Cárdenas Guillén es originario de Matamoros, Tamaulipas y fue sentenciado a 25 años de prisión por diversos delitos relacionados con las actividades del narcotráfico que realizó tanto en México como en Estados Unidos.
Cárdenas Guillen, en colaboración con Arturo Guzmán Decena, reclutó a 31 desertores del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano. Gracias a este guardia de sicarios con entrenamiento militar, Osiel Cárdenas se mantuvo por casi seis años como un jefe delictivo que ordenaba por igual el asesinato de colaboradores o enemigos.
Cárdenas Guillen estuvo catalogado por el Gobierno de Estados Unidos como uno de los más sanguinarios criminales de la historia, ya que, estaba acusado de más de dos mil homicidios por lo que se le imputaron 17 distintos cargos, además de ofrecer dos millones de dólares por su captura.
Osiel Cárdenas fue detenido en Matamoros, Tamaulipas, en medio de tiroteos. En 2007 fue extraditado a Estados Unidos donde fue condenado a 25 años de cárcel y el pago de una multa de 50 millones de dólares.
Cárdenas Guillén se declaró culpable ante una jueza federal de cinco delitos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y amenazas contra agentes federales.
Una vez que ingresó a la cárcel de Estados Unidos, en febrero de 2010, Osiel Cárdenas llegó a un acuerdo con el que evitó la cadena perpetua y de esta forma no ser encerrado en una prisión de máxima seguridad, a cambio de proporcionar información sobre la estructura de los cárteles en México.
La forma en cómo Cárdenas Guillen se ganó el apodo de “El Mata Amigos” se derivó de la versión de que en 1997, Osiel ordenó el asesinato de su compadre Salvador Gómez, El Chava, quien había heredado el control del cártel del Golfo tras la captura de Juan José García Ábrego.
De acuerdo con las agencias de información, la época de gloria de Cárdenas Guillén coincidió con el inicio de la carrera de personajes como Francisco Javier García Cabeza de Vaca, exgobernador de Tamaulipas, y quien enfrenta procesos judiciales en México y Estados Unidos por evasión fiscal y presuntos vínculos con la delincuencia organizada.
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La noticia Confía México en que EU extradite al ‘El Mini Lic’ fue publicada originalmente en Turquesa News.