Cardozo pudo ser delantero de Cruz Azul.- Como bien se sabe, representar a México en una Copa Libertadores no es poca cosa. Y en el año 2001, después de que Cruz Azul lograra ganarse ese privilegio en una prelibertadores, la directiva cementera puso manos a la obra para armar un plantel competitivo.
La promesa era sencilla querían tener el Estadio Azteca y llegar hasta la Final.
“Billy hizo todo. Yo no participé, solo nos dijo y ya. Fue un acierto haber jugado ahí porque aunque muy argentinos, jugar en el Azteca impone por su diseño muy alto y en ese tiempo con casi cien mil aficionados”, dijo Guillermo Mendizábal en una entrevista, quien entonces el director deportivo del club.
Por su parte, Billy Álvarez conocía muy bien a su plantel, a cada uno de sus jugadores, así como sus carencias y virtudes.
El dueño del club sabía que pese a tener a Francisco Palencia como delantero estrella, necesitaba a uno más y José Saturnino Cardozo apareció en la mente del presidente celeste, quien de inmediato fue a platicar con Don Nemesio Diez y Rafael Lebrija para tener el préstamo del Diablo Mayor.
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“Eran posiciones que pensábamos nos hacían falta. Cardozo estaba en un gran momento y sabíamos que ya había jugado algunas Libertadores, Billy también hizo la negociación con Don Nemesio Diez y con Rafael Lebrija”, detalló Mendizábal.
De igual forma en la defensa hicieron un ajuste porque Sergio Almaguer llegó del Necaxa y Guillermo Álvarez prometió en la mesa de ambas directivas regresar a los futbolistas, por lo que en ningún momento trató de “seducirlos” para no quitarse la camiseta que llevaban puesta.
“Fue muy claro que solo era un préstamo, el licenciado es un hombre de palabra y por mucho que lo quisiéramos, Cardozo se tuvo que ir. Estoy seguro que si se hubiera movido tantito con los jugadores hubieran dicho que sí, pero no se valía porque tenían que regresar a sus clubes”, dijo el exdirectivo.