Cabe señalar que el avance de 0.1 por ciento que registró la economía mexicana en el periodo abril-junio resultó contrario a la caída que anticipaban algunos analistas, quienes preveían que así sumarían dos trimestres consecutivos a la baja y con ello caería en lo que se denomina una “recesión técnica”.

En su comparación anual, agregó el INEGI, la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto con series desestacionalizadas tuvo un incremento real de 0.4 por ciento en el trimestre en cuestión con relación al trimestre abril-junio de 2018, con lo que extiende su tendencia al alza de los últimos nueve meses, pero a un ritmo más moderado.

Por actividades económicas, el PIB de las Actividades Primarias creció 1.7 por ciento y el de las Terciarias 1.0 por ciento, en tanto que el de las Secundarias descendió 1.6 por ciento en el mismo periodo.

El organismo señaló que en el primer semestre de 2019, la Estimación Oportuna del PIB muestra un crecimiento de 0.3 por ciento respecto al mismo periodo del año pasado, de acuerdo con cifras desestacionalizadas.

No obstante, con cifras originales, la Estimación Oportuna del PIB mostró un caída de 0.7 por ciento en el segundo trimestre de 2019 con respecto a igual trimestre de 2018, con lo cual acumula un crecimiento de 0.2 por ciento a tasa anual en el primer semestre.

Por actividad económica, en el segundo trimestre el PIB de las Actividades Primarias subió 1.4 por ciento y el de las Terciarias creció 0.1 por ciento, en tanto que el de Secundarias cayó 1.8 por ciento con relación a igual trimestre de 2018, con datos originales.

El Instituto precisó que las estimaciones oportunas proporcionadas este miércoles podrían cambiar respecto a las cifras generadas para el PIB trimestral tradicional, las cuales se publicarán el próximo 23 de agosto de 2019.

El pronóstico de crecimiento de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para la economía mexicana en 2019 se ubica actualmente en un rango de 1.1 a 2.1 por ciento, y para 2020 de 1.4 a 2.4 por ciento.